Mantelo Simple

El tener una conversación con un/una bebé es diferente a tener una conversación con un adulto y un(a) niño(a) mayor. Cuando hablamos con cualquier niño(a) pequeño(a), hacemos nuestras caras y voces expresivas, intentamos decir cosas interesantes y usamos frases y oraciones cortas y simples. Repetimos mucho porque sabemos que los niños pequeños no sólo están intentando entender lo que les queremos decir, ellos también están intentando aprender acerca del lenguaje que estamos usando. Los bebés que son sordos y se les dificulta el oír están intentado a alcanzar los mismos retos. Puede ser que necesiten muchas, muchas oportunidades porque tienen que poner mayor atención para entender un mensaje. Nuestros mensajes tienen que ser cortos y simples porque el trabajo de adquirir lenguaje es complicado.

Usted ha practicado el responder a señales, comentar sobre los intereses de su hijo(a), seguir la pista de su bebé y guiar las conversaciones a mundos nuevos y emocionantes. Cada vez que usted use una de estas habilidades, usted también tendrá que practicar el mantener su turno conversacional corto y simple.

Los adultos les hablan de manera diferente a los bebés que a cualquier otra persona. Ellos usan frases cortas y animadas y mucha repetición. Estos cambios sirven a un propósito importante.

Aquí hay algunos ejemplos de turnos conversacionales de padres que son precisos o que son demasiado:

​Corto y simple:​Quizá sea demasiado por ahora:
​​¡Mordida grande!​​¡Comiste una mordida grande y tu boca está llena!
​​Hora de ir a dormir.​​Lávate los dientes y después vete a la cama.
​​Ese es mi calcetín.​​Este es el calcetín de mami y éste es tu calcetín.
​​Mmmmmm, cereal rico.​​El cereal sabe muy rico.

Ejercicio:

Aquí hay algunas frases que los padres pueden usar con sus bebés. Todas son acerca de ideas que puedan interesar a el/la bebé o a responder a una señal. Algunas de ellas son demasiado largas. ¿Cuáles de ellas piensa usted son cortas y simples?

Su bebé levanta una taza vacía.

A."¿Quieres más leche cuando hayas terminado?"
O
B. (ve en la taza) "Ya se acabó." (levanta la leche) "¿Quieres más leche?"

Crítica:

Ambas frases en (B) son cortas y apoyadas por una acción. Su bebé tiene la oportunidad de entender el significado y el lenguaje.

Su bebé se queja y empuja un juguete.

A. "¿No más juguete? Está bien."
O
B."Ya no quieres este juguete. Vamos a agarrar algo más para que veas."

Crítica:

Las frases en (B) expresan buenas ideas, pero son bastante largas para un(a) niño(a) con una pérdida auditiva. Las frases cortas, como en (A), afirman la idea de el/la bebé e invitan a el/la bebé a jugar algo nuevo.